martes, 22 de marzo de 2011

El Arte de Aprovecharse del Puesto


Como sabrán, soy un poco olvidadizo, pero nunca olvido que los detalles son los que marcan la diferencia de cualquier cosa. En este caso, este sector del que escribo, se constituye de falsedades, humo y mucho bla bla bla. Que es correcto, es parte del sistema de la moda, es parte del mecanismo objetivo de producción de información para convertir un trozo de tela en algo más que fibra de algodón -o cualquier otro-, y que es algo que los profesionales lo sabemos, o en teoría deberíamos saberlo y tenerlo muy claro.

Sin rodeos me voy a ésto que ha estado circulando en pocas páginas webs y por ahí alguien que levantó la mano en Facebook Fashionisma.es y es que me parece algo muy curioso, no solo por las implicaciones comerciales que lleva bajo el brazo, que son más que evidentes, sino por la relación entonces entre las hermanas dentro de la misma cabecera editorial y de la competencia.


Teniendo esto de base, el polémico vestido de Dolce & Gabbana, sí el vestidito veraniego muy simplón, que tiene apareciendo Febrero-Abril en las revistas femeninas especializadas en moda, con nombre VOGUE y ELLE


Citando propiamente a Rafael Rodríguez Barros, periodista de moda y colaborador de Modaes.es, al leer su artículo sobre "La Trama Dior", saqué una frase para toda la vida debido a mi interés particular por el mundo editorial y el publishing.

"La libertad de expresión de las revistas de moda suele ser inversamente proporcional a sus ingresos publicitarios"

Y quien me diga lo contrario, no tiene ni idea lo que es el sistema, quien crea que el hecho de que un mismo vestido esté en cuatro portadas es un despiste de las estilistas, quien diga que una sola marca es capaz de salir en portada en un periodo tan corto solo por el hecho de que su colección sea muy buena, es que piensa muy inocente, y en este sector mis queridos, nada es casualidad, nada es al azar, nada es un golpe de ingenio y suerte, al menos ya no lo es, y es lo que escribimos en la prensa para que sigamos teniendo artículos inalcanzables y deseados, para seguir hinchando las cuentas de holdings, porque queridos, la moda ya no es lo que era, y quien siga pensando en la vieja escuela... es bueno añorar, pero aquello se ha acabado. -Pero ese es otro tema-


Si seguimos la cronología la primera en sacar el vestido incómodo fue el Vogue España, lo que en teoría hace a Yolanda Sacristán, una pitonisa, porque ella desde Febrero ha dicho. "Que sí chicas, a que estos Italianos saben hacer trapitos -¡A comprar!-", luego viene la reacción en cadena, Elle Rusia, Vogue Alemania, Vogue Paris.


Lo peor de todo esto creo que ha sido para Emmanuelle Alt, que queda como una vil tonta al estrenar lugar en el Masthead de la revista y sacar una portada tan poco original, teniendo en cuenta que en España se publicó dos meses antes.

Es que no me lo creo, imagina, con la influencia que debes tener en CondeNast, es obvio que tienes privilegios y tienes información de primera mano. Revisemos tiempos.

Carine deja la editorial en finales de Diciembre, para la segunda semana de Enero 2011 ya había sido nombrada la Alt. Quiere decir que estaban cerrando Marzo con los ultimos photoshootings de Roitfeld. Para ese entonces, finales de Enero, al momento que Alt toma posesión, Vogue España ya tenía listo el print del mes, si no es que ya lo tenía fuera en circulación; Me voy a creer que NADIE en la redacción de Voguettes, levantó la mano para decir, "Scuse moi" que eso ya lo hicieron las españolas, ¿para qué nos vamos a llevar a la Bündchen a hacer algo igual, cuando todavía estaban en tiempo de preparar el número?, por supuesto que no me lo trago.

Ahora bien, el arte del engaño de los showrooms de Dolce & Gabbanna, para colarles a todas las cabeceras el mismísimo vestido. Descartado, nadie engaña a una estilista, NADIE, menos con apellido editorial importante. Como si existiera un solo vestido, y éste volara por todos los paises, como si no existieran los mails o los encuentros por ahi entre las mismas del gremio, si todas se conocen, el engaño habría salido..."Oye chica, que estamos haciendo la misma editorial todas".

Y sí, Paris tiene a Gisele, pero tiene un vestido mas visto que nada, publicado dos meses antes, y sin mucha propuesta que digamos, teniendo colecciones espectaculares de SS11 como Prada, Celine, Chloé, y sí la cole de Dolce & Gabbana es muy buena, muy italiana, muy afín a los códigos del duo siciliano, es igual de buena como aquella con animal print y lencería ¿recuerdan? del año pasado, pero para mi esto es ponerle un puntazo negro a la coordinación editorial, además de una gran X estilosa a la debutant Emmanuelle Alt.

Nunca he podido ver una revista -y menos de moda- de igual manera, ya no; empiezo a hacer cruces, contar contenido, contar anunciantes, contra, guardas, y detectar información propia, y contenido comprometido. Que es una realidad, y que claro que también se venden las portadas, lo que me lleva a pensar que los Dolcegabbanicos facturan y bien, para permitirse estos lujitos, de publicitarse globalmente.

Con todo lo anterior, me lleva a concluir y suponer que no es casualidad que el vestido incómodo esté en más de cuatro portadas, ya que tiene todo el rastro de ser una estrategia planeada, revisada, comprometida y pagada.

Y como sigo teniendo espíritu curioso, me puse a revisar qué otras cabeceras habrían podido estar metidas también en la repartición del presupuesto. Pues bien, el hecho es que la Harper's Bazaar España, también tiene en su portada de Marzo un Dolce & Gabbana blanco, en encajes, no el mismo vestido pero muy bien citado en la cover, como cada numero. Que por cierto el numero es sensacional en contenido, pero esa ya es otra historia.


También casualmente, Vogue Italia ¿adivinen quién tiene en portada de Marzo?, ya sobra decirlo, misma label, diferente modelo. ¿Casualidad o no?, No puedo responderlo, La Vogue Italiana siempre es muy patriótica, siempre prioriza diseño Italiano, para portadas, primeras paginas publicitarias y editoriales. La verdad es que en eso todas las demás tienen mucho que aprenderle a la Sozzani que es de las mejores directoras de CondeNast.

Entonces, ¿Ha pagado o no, Dolce & Gabbana todas las portadas de Primavera-Verano 2011 de las principales revistas femeninas europeas?. Todo apunta a un sí, un sí rotundo por todos los motivos anteriores. Saberlo con seguridad es imposible y afirmarlo pues tampoco, porque no tengo en mis manos las facturas que lo comprueben, ni tampoco aunque conociera a todas las jefas/es de publicidad de las revistas me lo dirían. Secretos de estado.

Lo que me hace gracia es que todavía en plena epoca del sígueme en Twitter y desfiles retransmitidos online y megacampañas publicitarias, en plena época de compra y venta de casas de moda como si se tratáse de una tienda de abarrotes, sigamos creyendo en las inocentes casualidades en el mundo de la moda.

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